Es una obviedad, pero vale la pena recalcarlo: el agua es fundamental para los scouts navales. Lo que no es tan obvio, es que no sólo hablamos del agua salada del mar, sino del agua dulce del río.

Y es que hoy en día, para ser scout naval no es imprescindible vivir frente a la playa. Cualquier lago, dique, represa, río o pileta es una excelente excusa para hacer escultismo naval. Mientras que haya la suficiente cantidad de agua para nadar, remar y divertirse con actividades acuáticas, el éxito está garantizado.

Es por ello que Scouts Navales de Argentina decidió abrirse a provincias del interior que están lejos del mar y llevar su forma de hacer escultismo a cualquier lugar del país.

En Mendoza, creamos éste, que es el 1º Grupo Scout Naval de Cuyo, con la misión de llevar los valores y enseñanzas de Robert y Warrington Baden-Powell y la esperanza de crecer y crear nuevos grupos scouts navales en la región.